Como yo no hay dos.

16:31 Mónica 1 Comments

Dejar de ser quien eres para empezar a ser quien quieren que seas. Permanecer todo el día con una sonrisa en la boca y romper a llorar por las noches, con la única compañía de tu almohada. Reír sin ganas, llorar sin llegar a desahogarte. Navegar continuamente entre las aguas de la realidad y la apariencia. Vivir fingiendo, por no tener a nadie con quien ser real...

Comportarte así es el mayor error que puedes cometer. Recuerda, sólo tenemos una vida, es una estupidez malgastarla con algo así. Ríe cuando quieras reir, llora cuando necesites hacerlo, sé amable cuando te salga de dentro y sé borde cuando te apetezca. Haz lo que quieras sin pensar en lo que dirán de ti. Porque vivir pendiente de la imagen que estamos dando no se acerca lo más mínimo a vivir.


Tengo mucha vida y este don de gentes,
creo en mi misma, no es cuestión de suerte.
Tengo otro concepto de comerme el mundo, amor...
como yo no hay dos.
Ya no me quedan ganas de fingir que soy aquello que tú esperas.
Como yo no hay dos - Vega

1 comentario:

  1. Vivir para los demás es lo peor que se puede hacer. Hay que anteponerse uno mismo (con control siempre, claro) a lo que piensen los demás, porque al final, nadie va a mirar por nosotros como podemos hacerlo nosotros mismos.

    ResponderEliminar